Como muchos mexicanos he estado preocupado por un acontecer nacional que hace sentir a algunos que hay síntomas de preocupación por considerar que estamos en un proceso de estado fallido, me ha tocado vivirlo como ciudadano, como abogado, como docente y circunstancialmente como funcionario y por ello como receptor de las opiniones de muchísimas personas que tienen también que vivir sufriendo las consecuencias de las acciones y omisiones del gobierno y como sobrevivientes de sucesos comunes, nos convierte por haberlos parecido en interlocutores válidos sobre el tema; no ignoro que hay muchas obras benéficas que se han hecho por nuestros gobernantes, con el presupuesto de que gozan sería verdaderamente imposible no hacerlo, pero además de que exactamente para eso están ahí, para beneficiar a los gobernados; debo decir además que dejo los elogios ya que todos sabemos que hay multitud de “desinteresados” promotores en cantar las bondades del sistema y de los jerarcas en turno, a quienes, en su gran mayoría los elogios han tapado los oídos y les impide escuchar las quejas, promoviendo en todos los niveles de gobierno la existencia de un gobierno, en todos sus niveles de un estado autista.
Hubiera preferido que este ejercicio de comunicación con un hipotético lector se hubiera dado frente a frente, gozando de un café que incentivara la réplica, no como debate que alguien tiene que ganar, sino como intercambio de ideas de las que puede salir algo bueno y al no ser posible hacerlo así, pues lo hago ante la computadora que no se niega nunca a recibir opiniones, por absurdas que estas puedan llegar a ser, pero que a cambio de esa docilidad, se mantiene impávida ante cualquier opinión que se sustente; sin embargo sí que me emocionaría que provocara alguna inquietud en quien lo lea.
Por ello mis opiniones son estrictamente personales, sin representación alguna y no tienen la intención de que perturben a corporativo o entidad alguna, pretenden sí perturbar a mi solitario lector como hombre libre, crearle dudas y con ello generar opiniones particulares, no necesariamente iguales ni coincidentes con las mías, pero que reunidas puedan generar acciones de justicia.
Siendo un informe y no un estudio del estado tampoco pretende ser exhaustivo ni materia de un estudio de situaciones que pudieran haber generado el que nos encontremos en la situación actual y cuando cite datos señalaré la fuente de los que la obtuve; pero creo que estos señalamientos deberán tomarse cuando menos, por quienes lo lean, como síntomas de que puede haber “algo podrido en Dinamarca”
Desde luego que mi crítica es respecto al gobierno como tal, sin importar en absoluto el partido en el gobierno ya que todos han mentido, robado y sido ineficientes, con particularidades de cada uno de ellos y por tanto debo hacer una necesaria manifestación en virtud de que las generalizaciones son absurdas y habrá funcionarios que no hubieran participado en los destrozos, aclaración que hago, aun a sabiendas de que muchos de los que si participaron en ellos se autoexcluyan.
El peor augurio de este 2012 han sido los políticos de trapecio, los chapulines. Concretamente en Jalisco, me horroriza ver a funcionarios que renunciaron a sus cargos (sin responder de modo alguno de lo que han dejado, como Cihuatlán o los desechos de una Villa maltrecha llamada "Panamericana") para postularse a otros, y ahí están de facto, en espectaculares sin sustancia, sin mensaje, sin nada de nada. Espero la alternancia renueve, ya es hora de otros aires.
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